El paso de misterio es neobarroco, tallado en madera color caoba realizado en 1970 por José Martínez Martínez, ampliándose en 1988 por su discípulo Manuel Durán González. Consta de canastilla, respiraderos y crestería, tallados representando formas vegetales de hojas volutas y ramas, y arquitectónicas como molduras y frisos.
Las carteras de la canastilla, policromadas y estofadas representan escenas evangélicas de los Misterios del Rosario, en consonancia con la advocación de Nuestra Amantísima Titula. En la delantera figura una Alegoría de la Oración en el Huerto, inspirada en la oración del Señor: «Padre, pase de mí este cáliz». Los Misterios Dolorosos se completan en las esquinas: Cronación de espinas, Flagelación, Jesús con la Cruz a cuestas y la Crucifixión.
En uno de los costeros figura el Nacimiento de Jesús, como ejemplo de los Misterios Gozosos y símbolos de la naturaleza humana de Cristo. En el costero opuesto y en recuerdo de los Misterios Luminosos, aparece la Transfiguración, simbolizando la naturaleza divina de Cristo, y por ser el Evangelio del II Domingo de Cuaresma, día de nuestra Función Principal. En la trasera los Misterios Gloriosos son representados por la Asunción y Coronación de la Virgen, con alusiones a la Resurrección y Pentecostés.
Se ilumina con candelabro de guarda brisas con coronita dorada (1988) y cera color tiniebla.
Los de esquina tienen siete brazos y los laterales, cinco. Las garras de los candelabros y las terminaciones de los brazos fueron doradas por Ángel Feria
En la delantera luce una reliquia de San Juan Bosco, santo salesiano titular de la Hermandad, dentro de un relicario de plata de ley (Hijo de Juan Fernandez. 2009).
El llamador del paso representa volutas de hojas de acanto en metal dorado, y en su base del escudo de la Hermandad. (Villareal, 1979).
Lleva faldones en terciopelo rojo con broches y faldón delantero bordado en oro con el escudo de la Hermandad, inspirados en la puerta de la Capilla del Carmen (Araujo, 2004)
El señor lleva potencias en plata sobredorada (Ramos, 1992). Tiene forma de carteras en cada una de lo de las cuales se aloja una inicial JHS en pedrería fina. Adornos vegetales rodean la cartela que es su parte superior muestra los relieves de un olivo y un cáliz, alusivos al misterio del paso. De este conjunto salen tres grupos de rayos plisados que sostienen dos ángeles tunantes en bulto redondo.
El ángel lleva un cáliz de plata de ley (Ramos, 1999) y una cruz de plata repujada (Hijo de Juan Fdez, 2006)
